martes, 8 de diciembre de 2015

Morezón.

                  Todo esfuerzo tiene su recompensa cuando hablamos de espacios abiertos. Si encima nos rodeamos de amistades y lo mezclamos todo con buen tiempo, es indiscutible que todo ha de salir bien, la mezcla es perfecta.



                Gredos siempre es un reto para mí, pero nunca quiero perderme la satisfacción de pasear por él.



Por eso el buen tiempo es de agradecer,
 y un lujo que se paga en con esfuerzo razonable
 y proporcional a las satisfacciones que te llevas.



La luna nos quiere acompañar un rato
 antes de irse a descansar, 
nos da los buenos días…


La altura nos da la ventaja de poder disfrutar de los alrededores… 


…de inmortalizar imágenes y asociarlas a momentos. 




Momentos que respiras cuando vuelves a ver esas imágenes.




No hay que dar tregua a la mente…


    ...que recoja todo lo que pueda
 y lo procese poco a poco…


El invierno es muy duro en estos parajes, y en muchas ocasiones se paga un precio muy alto cuando la climatología es adversa, o los intrépidos que se sienten sobrados, arriesgan más de lo que debido, Gredos en invierno es un lujo caro,  y no cobra en dinero…






El esfuerzo final, ese que crees que es demasiado agotador antes de hacer cima…


...es del que te sientes más orgulloso…


... y lo olvidas cuando recibes 
su fruto en forma de imágenes…







Es in negable, que tú como mi fiel compañera, 
me hagas sentir vivo y presente 
aunque yo no me de cuenta..




Te quiero grande, 
como mis deseos de contemplar
 lo que se puede sentir desde tu cima…




Nos sentimos como si fuera normal el poder estar allí…


Nosotros, no somos los únicos en querer
 decir que hemos estado aquí…



Rendimos  homenaje al Sol... 

te demos gracias por colaborar 
con nuestros deseos." 

"Porque en este momento, 
nuestros sentimientos 
están  unidos gracias a ti…"


…estuve allí y lo contaré…


Hay más paraje que ver…vamos...



Camino del refugio del Rey...






…ni es del Rey, ni es refugio…






Seguimos caminando…


…no sin esfuerzo…


Decimos adiós al refugio del Rey, allá a lo lejos…


La naturaleza no deja de maravillarnos
 con sus reclamos en forma de esculturas…





Pensamiento en voz alta.
             Al regresar a un sitio, que ya en otra ocasión
 yo me sentí orgulloso de haber estado en él,
 me gustaría encontrármelo como mis recuerdos
 lo reflejan en mí cabeza,
 sin mal trato o dejadez.
   Por eso sirva esta foto, que aún está en mi recuerdo, 
cómo homenaje a un símbolo, que si bien no es de mi agrado, 
alguien lo puso hay, como referencia de un lugar.
Así es como era y yo la recuerdo,
 la cruz que señalaba esta cima,
 que ya no está.



 Fin.