La Ermita de la piedad.
Siempre
que vas a un sitio que ya has estado varias veces anteriormente, crees que nada
puede sorprenderte, pues bien, después de hacer esta ruta por quinta vez o sexta,
no recuerdo bien, la sorpresa se refleja en mis fotos, nunca hice de esta ruta
tantas fotos, no paraba de sorprenderme. Si bien es cierto que no la hicimos por
dónde habitualmente se hace, osea por la pista forestal, pero el caso que es que me lleve una grata
sensación del lugar. Le atacamos a la cascada sin saber, por la parte sur y pudimos ver la desde abajo, después de llegar al lugar.
Nos
entretuvimos bastante, más de lo calculado pero mereció la pena. En fin os la recomiendo, pero hacer
como nosotros, no os conforméis con ir directamente a la ermita, que se puede
llegar hasta en todoterreno, el lugar es maravilloso y muy grande, a la vez que
gratificante para el alma y te da un balón de oxígeno para el resto de la
semana.
Como telón de fondo el Macizo
Central, eso sí que es un pasada, encima con nieve. Lo que hizo que la
temperatura fuera ideal para andar, hizo fresquito, ya me entendéis… como dicen
los serranos…que al frio le llaman fresco.
La visita obligada es a la Ermita de la Piedad, un lugar privilegiado por su enclave, es un punto elevado en la sierra con vistas generales a Gredos, al pueblo de la Vega, a los que los paisanos llaman el Vegazo, que no es otra cosa que un llano por donde discurren los meandros del el río Alberche y que en tiempos remotos pudo ser un lago, ya extinguido por la sedimentación de unos pocos millones de años.
Bien, la Ermita ya tampoco es Ermita, porque solo queda la base de lo fue las paredes, al igual, una especie de choza aneja a dicha Ermita. Cuentan en el pueblo, en el que tengo familia y de ahí parte esa información, que era el lugar donde celebraban una romería, a la que acudía todo el pueblo y gente de otros lugares, se celebraba una corrida de toros en un especie cerramiento en forma casi circular que hay por debajo de esta Ermita. En un lugar, que también pudo ser una especie de glaciar, cuya lengua salía por donde ahora discurre el agua de un arroyo, que lleva el mismo nombre que la Ermita, que llega de lo alto de la sierra. Y que al término de este sitio cae en forma de cascada, una cascada de unos veinte o treinta metros… por lo menos, la palabra que te viene a la cabeza cuándo la ves por primera vez es “ESPECTACULAR”.
Poca gente la conoce, he incluso los del pueblo, muchos no la han visto nunca. Es imposible verla si no es desde donde nosotros la visitamos, no se ve desde la carretera, tampoco desde el pueblo, esta arropada por dos cerros que hacen como de bastidores que la ocultan, como si de un secreto se tratara.
La visita obligada es a la Ermita de la Piedad, un lugar privilegiado por su enclave, es un punto elevado en la sierra con vistas generales a Gredos, al pueblo de la Vega, a los que los paisanos llaman el Vegazo, que no es otra cosa que un llano por donde discurren los meandros del el río Alberche y que en tiempos remotos pudo ser un lago, ya extinguido por la sedimentación de unos pocos millones de años.
Bien, la Ermita ya tampoco es Ermita, porque solo queda la base de lo fue las paredes, al igual, una especie de choza aneja a dicha Ermita. Cuentan en el pueblo, en el que tengo familia y de ahí parte esa información, que era el lugar donde celebraban una romería, a la que acudía todo el pueblo y gente de otros lugares, se celebraba una corrida de toros en un especie cerramiento en forma casi circular que hay por debajo de esta Ermita. En un lugar, que también pudo ser una especie de glaciar, cuya lengua salía por donde ahora discurre el agua de un arroyo, que lleva el mismo nombre que la Ermita, que llega de lo alto de la sierra. Y que al término de este sitio cae en forma de cascada, una cascada de unos veinte o treinta metros… por lo menos, la palabra que te viene a la cabeza cuándo la ves por primera vez es “ESPECTACULAR”.
Poca gente la conoce, he incluso los del pueblo, muchos no la han visto nunca. Es imposible verla si no es desde donde nosotros la visitamos, no se ve desde la carretera, tampoco desde el pueblo, esta arropada por dos cerros que hacen como de bastidores que la ocultan, como si de un secreto se tratara.
En fin pasen y vean…
El desnivel de este paseo, es solo de unos doscientos metros,
ya que partimos del puerto Chía, que está a 1663 metros, y lo más alto que
llegamos a estar fue de unos 1850 metros. El desnivel casi todo la haces al
principio, para que valláis calentando, luego es casi todo llano.
Nosotros el recorrido le hicimos en unas cinco horas, pero
con sus paradas puntuales... al intentar llenar nuestros sentidos de todo aquello
que nos impresionaba, y eso era mucho claro... sobre todo si lo quieres
inmortaliza en fotos. Es decir que paramos muchísimo… hicimos unos doce kilómetros,
entre ida y vuelta.
Antes de comenzar la ruta,
decir que el día estaba propicio para para la fotografía, la luz, las
condiciones climáticas…
...Yo flipaba en colores….
...Yo flipaba en colores….
Pero comencemos....
Como decía, en un principio
es todo subida…pero para descansar puedes recrearte con las vistas…montañas por
todos lados…
Esta foto, es un buen
ejemplo de la perspectiva atmosférica, pero eso es harina de otro costal…me la
guardo para mi libro.
"Este año te echo de menos,
no he ido a visitarte, pero todavía no es tarde…"
Fijaros en el alto de la Serrota,
con su punto geodésico de grandes dimensiones…
pero sigamos subiendo...
Espectacular la vista del
macizo de Gredos entre pinos cercanos…
Que curiosa.... pero no la imagen, sino la vaca…
José sostiene un trozo de hielo
que sacó del riachuelo.
Sé que pongo muchas fotos
de este sitio, pero imaginaros todas las que no pongo…
...nos entretuvimos todo lo
que quisimos…
¡coño... un pareado!.
Una vez en la casa…
....bueno otro rato largo para inmortalizar todos los momentos que pasamos, he imágenes que allí vimos…
....bueno otro rato largo para inmortalizar todos los momentos que pasamos, he imágenes que allí vimos…
La casa estaba a punto de
terminar de caerse…pero el paraje y el entorno nos hizo pensar en poder vivir
allí. Una casita en la montaña cono la de Heidi….
En los mapas aparece como
la “Cija de Cervunaloco”
Esta foto, en principio no
resalta nada, es una fuente entre rocas, pero fijaros en el cielo…la cantidad
de aviones que pasaron y las estelas que iban dejando…
Enfrente de la puerta dela
casa, sale un camino que empieza detrás de esta portera, y que continuamos por
él dirección sur…
Perdonar que no pueda
resistirme a una mirada a la sierra toda nevada…
En el camino discutíamos, si la cascada estaba por el lado de la derecha o debíamos continuar dirección
sur, cuando reparé en esta imagen….
…es la Ermita de la piedad,
estábamos por debajo de ella y no por encima, como yo pensaba y casi me hacen
caso…
Pronto pudimos oír el ruido que delataba su presencia…allí estaba esperando que alguien fuera a verla.
...estaba esperando que alguien fuera a verla. Porque si no vas, no la puedes ver, es imposible verla desde otro sitio, este es el lugar, ahora deber conseguir el punto de vista más idóneo.
Antes una comparativa para
hacernos a la idea de su tamaño real..
Un vistazo general antes de
seguir andando….
Y… “Hooo” ….¡sorpresa! ….Narcisos,
los que pensábamos ver en la laguna del trampal, y justo a tiempo, se estaba
pasando la época de ellos, son muy tempranos. Son del inicio de la primavera.
Y esta es la foto que estaba
viendo… Serva… en un mar de Narcisos....
Pero no fue la única flor que
estaba por allí, casi todas compartían el color verde con el amarillo…
Continuemos andando para
ver la cascada des de otra perspectiva….
Aquí podemos apreciar los
dos bastidores, o como los queramos llamar que impiden que la cascada sea
visible desde otro lugar…y también por donde discurre el río que baja por ella…que
está tapado también por el forraje de árboles y vegetación…
Un vistazo desde lo alto de
la cascada…
Fijaros allí en frente,
otro mar de Narcisos…por aquí abundan mucho…
Pero continuemos, que el
reloj dice que nos estamos entreteniendo mucho…
¡Callar… a ese puñetero
reloj, hombre…
...que nos va a cortar el rollo..!
...que nos va a cortar el rollo..!
Gredos que pasada….
Esta es la zona por debajo
de la Ermita, aquí se celebraban las romerías en honor a la santa, La Piedad, a
la cual alzaron un Ermita en un alto, desde el que se podía observar todo el
pueblo y alrededores…
Si os fijáis bien, hay una
especie de cerramiento en forma casi circular, allí se celebraban festejos
taurinos, una plaza de toros tipo rustica y de característica popular…
No tuvieron problemas de
material, aquí la ladera de esta especie de hoya, tiene piedra tipo morrena, vestigio
de un pasado glaciar…posiblemente.
La luna tiene su espacio en
el cielo…
Esto es parte de lo que
queda de la Ermita, y esto es…era el ábside.
Si bien los musulmanes
orientan sus rezos u sus enterramientos a la Meca, los cristianos el altar, lo
orientan a la salida del sol, al este.
¡Quietos! Un vistazo
general antes de marchar…
Ahora el dichoso reloj, nos
da un toque sobre la hora de regreso, a si que...
“a la pa... hííí...”
Para finalizar unas fotos
de curiosidades varias, bichos, flores y otros….
…Una cigarra…
Restos que sin duda los
buitres saben algo…
Una seta de Mierda, es
decir, que sale de ella…
Un amable lagarto que posó
para nosotros un buen rato..
Jamm.