Sotillo de la Ribera.
15/4/2018

La distancia espacial entre amigos puede ser cruel cuando pensamos en no volver a ver a esa persona, pero sabemos que no es así, que solo tardaremos en verla. Ya somos mayorcitos y esto no nos puede romper los esquemas, podemos superar esto, porque no supone una tragedia, pero sí un rescoldo de un cierto sabor amargo producido por  ese sentimiento negativo, en el que una persona se va alejar de tu círculo y es aquí cuando parece que nos cuesta asimilarlo.

Con un toque de sabiduría y con la experiencia acumulada por la madurez de Kminando, sabemos poner remedio a este desatino con lo que mejor sabemos hacer, que es liarla: preparamos una marcha en su compañía y una comida que no deje duda ni espacio para el mal presagio.

Efrén, te sentimos tan cerca que los valores que tu desprendes nos hacen respirar humanidad, porque el solo susurrar de tus labios y tus palabras pausadas, llenas de sabiduría y de buenas intenciones, nos hace parar un momento a escucharte, porque seguro que nos vas aportar unos razonamientos de incalculable valor emocional…

El olvido no es una solución ni una consecuencia, ni siquiera una pérdida porque siempre estarás ahí para lo que podamos necesitar y de eso si tenemos que ser conscientes, de que no te vas, es que estás preparando una ruta, por tu pueblo, una de las que siempre queda algo por ver ¿Te crees que no nos hemos dado cuenta de eso…? …sino, ¿por qué no íbamos a terminar de ver tu pueblo?  Necesitamos una excusa para estar al lado de tus consejos y de que nos ilustres en lo que sea…sabes perfectamente que disfrutamos contigo y de tus cualidades como anfitrión, en eso eres un maestro, bueno y en todo lo demás…

Mi agradecimiento a tú presencia, y  como al sentimiento positivo de sentirte cerca, es ahora cuando el alma se llena de gratitud de todo corazón, por abrir una nueva dimensión…en la que la amistad se expresa en kilómetros, el cariño en minutos y los recuerdos en un libro. Gracias por ese tiempo en común con ese grupo, ese gran grupo al que perteneces y seguirás perteneciendo, pese a ese sentimiento espacial contrarío a nuestro parecer.

     

   

    

 Sotillo de la Ribera es una localidad y un municipio situado en la provincia de Burgos, en la comarca de La Ribera del Duero, partido judicial de Aranda de Duero, con ayuntamiento del mismo nombre.

Fue una jornada espectacular, pese a ese tiempo que marcó unas imágenes propias de un día de lluvia. Es la primera vez que hacemos un recorrido en autobús, cosa que debemos agradecer a la empresa de Hermanos Rodríguez. Este hecho nos permitió comer y beber sin la preocupación del regreso.

Quisiera comentar el elevado número de participantes que atrajo este día, número que incluso pudo ser mayor…También dar la bienvenida a tres participantes nuevas en el grupo, Inma, Mari Mar y Conchi. Últimamente nos vemos arropados por más personas en el grupo. 

Una vez en Sotillo, estiramos las piernas y pasamos a tomar un desayuno y aligerar el peso sobrante de nuestras vejigas.

Pasamos al bar de los Claveles, donde a Jordi le pilló desprevenido nuestra presencia, andaba un poco nervioso y preocupado, pero al final todos desayunamos y desbebimos…
los padres de Jordi eran del pueblo, pero él nació en Cataluña.

Iniciamos el recorrido parando en la Fuente y Pilón, pero antes nos llamó la atención un arco sobre un puente. Pero veamos que nos cuenta Efrén:

 “…lo hicimos nosotros cuando yo estaba de concejal, allá por el año 1983 al 1991. El alcalde era albañil, bueno luego se fue a trabajar a la Michelin, que ganaba más dinero. Negociamos con el “arzobispao”, se quitó el cementerio antiguo…hubo una espacie de procesión cuando se llevaron los restos…en fin. Con los restos de las piedras de este cementerio se construyó los muros y demás…si se fijan bien, se puede ver que alguna piedra es de una tumba. El arco es de la entrada del cementerio, el puente no…”

La fuente y el pilón.

“.. pasaba por aquí el Camino Real de Madrid a Burgos. Es la fuente que abastecía al pueblo de agua…por aquel entonces había unos 1.700 habitantes en el pueblo, después de la guerra y con la emigración bajó a unos 800, y ahora habrá unos 500…”

   “…una leyenda popular dice, que la mandó hacer el Duque de Lerma, hasta entonces era una fuente de campo, que, para que una de sus damas no se manchara de barro la hizo construir…” 

"...la parte de abajo era un bebedero de los mulos que entonces se usaban para la labor y de algún burro…”

Las Ermitas.

“...hay seis y no son de gran valor arquitectónico, son del siglo XVIII. Con muros rellenos de mortero de mampostería…y las esquinas y el pórtico de sillería. La más grande es la de la Virgen de los Prados, que es la coopatrona del pueblo junto con Santa Águeda, que da nombre a la iglesia del pueblo…”

“…un profesor de instituto y amigo mío, que ya murió y muy culto, diseñó la ruta de las ermitas y pudo ver que algunas formaban una cruz Latina con la iglesia en el centro. San Isidro, Santa Ana y La virgen de los Prados formaban el brazo largo y San Jorge, San Sebastián y Santa Lucía el corto…”

La Ermita de San Sebastián.

“…se hundió en la posguerra, se hundió el tejado y el cura de la época lo vendió, ha servido para guardar ovejas…yo como ermita no la he conocido…” 

Nos alejamos de este sitio encaminándonos al cerro de San Jorge.

Podemos leer un cartelito que dice:

“La fuerte vinculación de Sotillo de la ribera con la cultura del vino se expone en el valioso conjunto de lagares y bodegas del cerro de San Jorge, junto al casco urbano. Las bodegas se excavaron en tres niveles. Sus entradas suelen ser de piedra de sillería, a veces coronadas por un frontón, y en su interior muchas tienen arcos o bóveda de piedra. Algunas llegan a los 400 metros de largo y 30 de profundidad. Debajo de ellas se edificaron los lagares, que se sitúan a lo largo de una sola calle. Actualmente son utilizadas por peñas y grupos de amigos.”

En la actualidad estos lagares están casi todos en un estado ruinoso…

Nos vamos retirando hacia la ermita de san Jorge. Al volver la vista y aunque el clima desdice, la vista tiene su magia…

Las cepas son el principal protagonista de cualquier movimiento de cabeza, están por todos lo lados.

  Carmen y Paulino, conocedores del tema, comentan cosas que les llama la atención…

Pero escuchar lo que Efrén nos contó:

“… el pueblo se dedicaba todo al vino, porque el cereal como se araba con borriquillo se producía poco grano. Había un dicho que decía: "fanega tirar, fanega coger y paja ganar".

Las viñas estaban sembradas "a trebolillo", no había hileras ni filas, ni nada, como el trébol aleatoriamente. Luego vinieron con la vertedera y las plantaron en "líneos", a sí se llamaban en las viñas, en los "sembraos" se llaman surcos.

Las cepas de los sistemas antiguos de líneos se llamaban de vaso, con un sentido arbóreo. Las modernas que vemos con alambre se llaman espalderas facilitando las labores mecánicas…”

Continuamos por estos caminos que nos están dejando unas imágenes que resumen lo que comentaba Efrén, mientras unos barros en las suelas nos entorpecían los andares…

Vista del pueblo desde la Ermita de San Jorge…

Una reflexión de Efrén a raíz de un comentario de San Jorge, por parte de alguno, relacionó el dragón de uno de los chapiteles con la leyenda de San Jorge, nunca se lo había planteado.

“…un chapitel es esa especie de torre que podemos ver en la iglesia de la Santa Águeda, la verdad es que son linternas, una es del crucero donde está la cruz latina del brazo largo y del corto que hablábamos antes, y la otra es de una capilla. Uno de los chapiteles estaba deteriorado y se restauró con tela asfáltica, nosotros estábamos en el ayuntamiento, pero ni buscamos albañiles ni nada, metimos la pata, pero fue un acuerdo con el “arzobispao” la dirección era del cura-aparejador que supervisaba el arreglo de todas iglesias de la provincia, doctores tiene la Iglesia, así se acordó y así se hizo…”

“…pues en una hay un dragón, que estaba muy deteriorado en el desván de la iglesia, pero que estuvo allí siempre en el chapitel. Ahora llevará como unos diez años más o menos puesto y restaurado…”

“…hay tres niveles a la hora de escavar las bodegas…”

“p´adentro”…

“…está desnuda porque antes se dejaban las imágenes, pero ahora no, por miedo a los robos, bueno más que por esto es por subirlas y bajarlas. Antes tenía muchos habitantes y los hombres tenían mucha musculatura, mucho brazo de estar todo el día con la labor, pero ahora no hay quien la suba a hombros y quien la baje. Lo que hacen, es que la dejan el pueblo y la suben en un remolque…”

“…el retablo está a medio terminar porque se acabó el presupuesto y se quedó en la madera de nogal sin el pan de oro, las mujeres hace treinta años decidieron darla de barniz. Se las acabó un bote, compraron otro más oscuro y ni siquiera era del mismo barniz. Y quedó como lo veis…”

Sigamos con el recorrido, rodeamos la ermita por el cerro de san Jorge…

“…este cerro de San Jorge, está excavado en tres niveles y con tres caminos, que se formaron con la tierra que se sacaba de las bodegas. La cuesta era lógicamente cónica, como antes la gente rica tenía obreros, en invierno que llueve, nieva y hace frío, se les aplicaba en ensanchar las bodegas, bueno las cuevas o bodegas subterráneas, en la escuela se las llamaba cuevas, yo he visto los archivos y se llamaban cuevas…”

Esta encina tiene su encanto y muy pronto averiguamos el porqué.

     “...se la conoce como la encina de San Jorge, y es la que se representa en el escudo del pueblo, aunque hay otra en una zona que la llaman Las Zapatillas y no se sabe ciertamente a cuál se refiere este escudo, pero casi seguro que es esta…”

Sobran los motivos para abrazar a un ser vivo, pero por el mero hecho que simboliza a un pueblo ya es suficiente. La verdad es que, para alguien el necesitar aliento de un árbol puede significar mucho, cualquier deseo de sentimiento de alivio y esperanza sería bastante, es una cuestión de fe y de fe en uno mismo, por supuesto y en la buena voluntad de la naturaleza que, por medio de un abrazo queramos  sentir su calor a través de la corteza y pensar que su sabía simboliza la sangre que emana de su corazón, aunque vegetal, sabio y veterano. Es por tanto consolidar un deseo, de que todo vaya bien, claro que si…que se sepa, que todos lo queremos y estamos con el mismo sentir. Los árboles tienen una energía que solo tu mente bien preparada sabe entender…💖

Este Efrén es una máquina, no paraba de querer llenar nuestra avaricia de su saber, con cosas que pudieran parecer banales, pero en cualquier momento nos hacía falta su sabiduría para calmar esa sed de curiosidades…

“…allá en la distancia, se puede ver una figura de gran tamaño que es una estatua, que compite en silueta con las torres de teléfonos, es una escultura del sagrado Corazón. La hizo un señor del pueblo, era escultor, estuvo en Santo Domingo en la Republica Dominicana, cuando paro aquí restauró el monasterio a las monjas de Caluruega y tiene un montón de esculturas por todo el pueblo que las donó al pueblo, todavía vive pro ya está con demencia. Era un bohemio, recogía cosas del campo como setas y nidos de pájaros, iba por libre en este mundo, se llama Amancio Antón…”

“…esta es otra estatua de Amancio Antón, en homenaje a los mayores, está situado en un lugar muy conocido en el pueblo, le llaman la Viga, antes de existir el puente en el arroyo había una viga de lagar enorme, entonces decías… ¿Dónde quedamos, en la viga? Pues en la viga…”

Ermita de Santa Ana.

“…está al lado de donde vivían mis padres…”

“…el retablo ya es otra cosa, están representados las tres generaciones, el niño con la Virgen y su abuela, Santa Ana. Los “jubilaos” la cogieron como patrona a Santa Ana y San Joaquín, y el veintiséis de julio celebran una misa y en el salón del ayuntamiento tienen una comida popular…”

   “…los cuadros son recientes los han donado gente del pueblo, en la entrada hay un campanario que también hizo Amancio Antón…”

Ahora nos vamos camino de la vega, un camino paralelo al arroyo del puente…

Existía una protagonista en todo su esplendor, la flor del almendro…

Nos dirigimos a la ermita de San Isidro.

Desde el pueblo hay como unos tres kilómetros.

       El suelo parecía que estaba nevado, pero no, es la flor del almendro que no resistió el darnos unas imágenes para que le recordemos en todas sus facetas, como frutal, como flor y como adorno divino por donde pisar para seguir llamando nuestra atención…

Para paulino, esto era un campo de investigación, se fijaba en detalles que nosotros no podíamos saber qué coño eran…

Aquí, notamos el primer síntoma de que había que volver. No te echamos la culpa Efrén, sabemos que no lo haces con mala intención, es solo que el destino nos quiere guardar más días con Efrén, el que se te haya olvidado las llaves de la ermita es solo un pretexto del destino para decir que hay que volver, simplemente. De momento las vistas han sido y son espectaculares, pese a ese clima que no quiere que veamos todo en un solo día…

Para paliar este tiempo sin saber que decir, nos mostró Efrén su bastón, que se lo hizo un amigo y que es muy chulo…

¡Venga, vámonos a otro lado…!

Este almendro nos regaló una vista con su nieve, y al mismo tiempo nos inoculó una sensación difícil de poder describir si no sabes leer un rostro…

 La bendita lluvia hizo su aparición, contábamos con ella y con poco de sol que ese jamás apareció…

Andábamos ya por los Arenales…

“…los Arenales, se los llama así porque básicamente son de arena y son una buena zona para los viñedos, no necesitan tanta agua. La Vega es peor para los viñedos, pero da más cantidad, pero los Arenales da menos, pero la uva es mejor, de mejor calidad…”

No nos preocupó en absoluto, el agua solo moja…

Si es todo precioso y está lloviendo, me quiero imaginar esto con sol…sería una autentica pasada…

Decidimos que lo mejor era un aperitivito…y esa parada para dejarnos de mojar…

“…existe un bar se le conoce como el Pianillo, esto no es, este es el Real. Antes el "Pianillo" era más grande, pero se repartió entre tres hermanos, y se dividió en tres partes. Había un salón que era el salón de baile y el cine... y había un organillo para hacer la música, de estos de los bares…y la gente lo llamaba el “Pianillo”. Los domingos había baile y el cura vigilaba a las parejas… ¡Oye que te arrimas mucha a la novia…! Se hacía también el baile patronal de Santa Águeda…era el baile para la gente joven, se lo he oído hablar a mi padre…”

Bueno, creemos que lo mejor es ir ya al “Papeo…”

Llegamos a la peña el Ateneo…

“…las peñas en Sotillo, hay unas treinta, la mayoría tenía el nombre de la bodega, la nuestra se llamaba de Doña Ana y no nos gustaba, la pusimos el Ateneo. Un amigo que estaba haciendo “FP”, hizo en plomo la figura sacada de la portada de un libro de griego…"

“…el mismo que hizo la figura de la entrada, esculpió esta calavera cuando teníamos veinte años…”

“…cada pasillo se llamaba Nave y estaban llenas de cubas, depende de lo rico que fueras tenían una, dos o tres cubas y las bodegas no eran de uno, si no de muchos propietarios…”

No me esperaba menos, un recibimiento con un vaso de vino por parte del anfitrión…

“…las radios las trajeron dos o tres que eran albañiles y cuando hacían una reforma se traían de los desvanes cosas, radios, arados, etc. Y los ponían por aquí…”

“…la foto más antigua es del año setenta y cinco…¡madre mía! ¡de hace cuarenta y tres años…!”

Este monje marca la temperatura y soplando se la podía subir, pero mejor no digo donde se tenía que soplar…

Existían estancias anejas que servían de alacena, cocina y sala de “reservao”…

Pero vayamos al lío…venga, donde están estos encargados de traer lo rico, rico…

 Ahora con mi silencio dejo en vuestra imaginación lo que haremos en breves instantes…

Una sorpresa para Efrén, fue que le dijésemos que repartiera este postre que habíamos traído des Ávila…

Recopilamos en un libro de fotos todas sus andanzas con el grupo de Kminando, con fecha y los kilómetros realizados, es lo mejor que se nos ocurrió…

 ...y con una orla del grupo…

No le quedó más remedio que volver a deleitarnos con su voz, con un mensaje de agradecimiento, por haber participado con nosotros.

“…allí en Ávila hay sitios muy interesantes que por acá en Burgos no lo encuentro…”

Luego pasó lo que tenía que pasar, una pista nos la dio Efrén cuando al llegar a la bodega nos repartió unos cancioneros…

Jacinto como entendido en la materia, hizo de director de… borregos…¡perdón! de orquesta, e intentó dirigir lo que parecía que se iba de las manos por momentos…

 La verdad es que... 

...a nadie le importó...

...que aquello pudiera...

...sonar ni medio regular...

...cada uno daba lo que podía...

...lo malo es...

¿Cuándo lo daba…?

Mejor que solo veáis los gestos y los caretos, están todos muy guapos y guapas…

Pero nosotros nos lo pasamos BOMBA….

Pero como todo lo bueno si es breve, que no lo fue, pero sí lo pareció, dos veces bueno………

Antes de salir de la bodega unas imágenes para guardar durante mucho tiempo en la retina…

Y que mala suerte, al salir a la calle salió el puñetero sol para decir que era verdad que hoy se le podía ver…qué más da, no  hubiéramos cambiado la fiesta y la comilona por verle, de ninguna manera, vamos…

Nos despedimos, pero esto mola, hay que repetir, no cabe duda…

 El regreso estuvo dedicado a comentar las jugadas y a deleitarnos con unos paisajes que ya no veremos hasta la próxima vez, porque la habrá…

Antes de despedirme siempre hago un monologo de mi último pensamiento, pero esta vez lo tengo claro, es este…

Fin.

Jamm.

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