viernes, 4 de mayo de 2018


La laguna del Duque.

2/5/2018


        Al día se le pudo sacar más partido, pero en general no se le puede reprochar nada. El sentido común actuó y supo reaccionar ante un reto con alto grado de riesgo. Día precioso y gratificante en imágenes, que para este blog es suficiente.




Este objetivo está localizado en el término municipal de Solana de Ávila, situado al suroeste de la provincia de Ávila. Pertenece a la comarca del Alto Tormes y al partido judicial de Piedrahita, a pasar de estar más cerca del Barco de Ávila.


A Solana de Ávila se llega por la N- 110. Saliendo de Ávila capital, y como a unos 80 kilómetros, llegamos al Barco de Ávila. Tras pasar el pueblo sin dejar la N-110, y como a unos tres kilómetros, podemos ver un indicador, que ya nos muestra la carretera a continuar dirección a Solana de Ávila, nos desviamos a la derecha por la AV-P679. Una vez allí, cruzamos todo el pueblo por la carretera que viene siendo de color negro. 


Existe una duda en medio del pueblo, se bifurca en dos, tendremos que seguir por la de la izquierda, a pesar de que se llegaría por las dos, por esta es menos estrecha que la que sale a la derecha.




Pasado el pueblo, continuamos unos pocos kilómetros como dos o tres, y en una curva que está señalizada con una flecha y nos indica la dirección de la Laguna del Duque, nos desviaos a la izquierda. Donde a pocos metros, tendremos que abrir una portera de hierro, que por supuesto tras cruzarla la cerraremos.

El camino desde aquí y a pesar de que está asfaltado, no está bien, el asfalto se encuentra deteriorado y con numerosos baches, lo cual nos obligará a ir con mucho cuidado.






Por fin llegamos a la Central Hidroeléctrica del Chorro, donde dejaremos el coche.








Esta central la construyó una empresa llamada Hidroeléctrica Navarra, al frente de la cual el ingeniero de camino Emilio Azarola, a pesar de que la laguna ya contaba con un muro de contención, la represó para su aprovechamiento energético allá por el 1925.





    Hay algo que llama mucho la atención y es un tubo por el cual es bajada el agua a la central.



Tiene su origen en la misma laguna y llega al inicio de esta ruta, es decir a la central de la que hablamos…



        Un cartel nos informa de cosas, es decir, de las lagunas que hay el el lugar y podemos visitar. En esta ocasión es la Laguna del Duque, La Laguna del Trampál la dejaremos para otra ocasión, en que un experto nos guíe y llevé por el camino menos tortuoso y sin peligros, que por estos parajes el enrocarse es un serio problema…




El desafío de hoy parece fácil por ser un recorrido de corto kilometraje, pero tiene su dificultad en el desnivel, y eso si que importa…








Comenzamos a andar tomando un camino con la alambrada de la central dejándola a la derecha, pasamos por una portera pequeña de hierro de forjado, a modo de puerta. Luego un camino de piedras nos guiará.


Hay dos rutas para subir y bajar, lo bonito es conocer las dos, pero recomiendo por seguridad, que en invierno con la nieve y sobre todo con los hielos, no se suba ni se baje por la ruta del tubo. Discurre entre lanchares y un berrocal con una pendiente que nos precipitaría a la garganta en caso de deslizarnos.



            El tubo que ahora vemos y que sube hasta la presa de la laguna, luego nos servirá de guía par abajar.



        Este recorrido viene marcado por la ruta PR-AV 41, con unas señalizaciones que se ven bien.

                   
                   Se pueden apreciar las cascadas impresionantes que hay, pero una sorpresa en el descenso nos hará que no disfrutemos de ellas con todo su esplendor y un caudal suficiente como para sacar unas fotos bonitas qué, para lo cual veníamos preparados, y esa sorpresa es que se ponga en marcha la central y el agua sobrante no discurra por el rebosadero, sino por el tubo, y por lo tanto no baje para deleite nuestra.


Continuamos por un camino que nos recuerda una calzada romana, por estar hecha con piedras en casi todo el camino.




Unos riachuelos bajan y casi escondidos poner una nota musical en nuestras mentes, recordando que la naturaleza tiene un atractivo poderoso, si estás preparado para poder sentirlo así…







Llegados a este puno debemos seguir las indicaciones de la señal que nos llevará por la ruta que queremos hacer girando a la  izquierda,  el camino a la derecha nos llevará al camino del tubo.







También unas gargantas interrumpen el transito normal, pero con un pequeño esfuerzo se saltan bien…





















El tubo se va quedando a la derecha, dejándonos unas vistas muy atractivas…




El echar una vista atrás, viene bien para ver el camino recorrido, pero mejor viene para tomar aliento.


 Nos encontramos con dos ejemplares de Narciso Trombones
 (Narcisus confusus).

Esperábamos que por la fecha en la que estamos, este tipo de narciso fuese más frecuente, pero son los dos primeros que vemos…










Otro indicador nos confirma en el camino correcto, pero es fácil seguir, basta con ir por el camino que está bien marcado…




Estos trampales son peligrosos, pueden provocarnos una torcedura de tobillo, por lo cual hay que tener cuidado en ir pisando en lo alto de ellos.






La nieve la veíamos allá a lo lejos y no parecía que pudiera ocasionarnos algún problema en el día de hoy.











Tres ejemplares de Narcisos de Roca
(Narcisus rupícola).










Un ramillete de Narcisos de las Nieves 
(Narcissus bulbocodium subsp. Nivalis).





Esta foto es como homenaje a mí mismo por haber visto ya la laguna…




Está es de Chele, pero con menos celebración…








Se puede bordear la laguna por un camino que parece una calzada, como el que nos trajo hasta aquí.






Esta es la fuente del Marqués, a pesar de que parece más un arroyo …
























Está me la quedo como fondo de escritorio…




En este momento nos planeamos subir a la laguna Negra,  hacer una ascensión por un “collao”siguiendo un trak que consiguió Chele y que tenemos enfrente. No parece que tenga excesiva dificultad, eso sí encontraremos nieve.




De momento un vistazo a la vertiente de enfrente, que nos deja ver unas cascadas impresionantes…


Pero justo por donde empezamos la ascensión, otra nos llama la atención también, las hay por todos los lados…
















El desnivel es considerable, la laguna nos lo demuestra haciéndose más pequeña en la distancia.








Los primeros tramos con nieve…






















La nieve ya es nuestro piso y empieza a ser de una dureza palpable, nuestro instinto se activa y nos insinúa que debiéramos tener  mucho cuidado…
















Esta imagen nos indica que el espesor de la nieve es superior al metro…y encierra un peligro que no se ve…














Este es el peligro, metí la pierna y no toqué el fondo. Alrededor de las piedras, la nieve se deshace y queda un hueco que puede hacerte daño, lo malo es que las piedras están tapadas con nieve y el peligro no se puede ver…


Chele investiga otra piedra que tiene también un espacio peligroso.





La ascensión se pone dura, el desnivel es brutal, y nos empezamos a plantear abortar este reto de la Laguna Negra…










Observando este arbusto nos damos cuenta del espesor que la nieve tiene por aquí…





Hacemos una parada en unas rocas para replantearnos el seguir, o no…
Fijaros en la nieve que está cerca de las piedras, se puede ver una distancia, pues bien, el espacio que hay deja ver que el espesor de la nieve es superior a los dos metros. No nos imaginábamos que la nieve que había tenia tanto espesor, y tampoco que, en esta parte a diferencia de la primera al empezar a subir, estaba muy blanda. Habíamos dejado las raquetas en el coche, nos parecía que no íbamos a encontrarnos en esta situación.

 Lo mejor es que nos demos la vuelta, se puede oír perfectamente un arroyo corriendo bastante cerca, debajo de toda esta nieve y el caer dentro eso sí es un peligro. 

Es cuando decidimos que no podemos ni queremos correr un riesgo que no deseamos. Al principio en la introducción dije que una sabia decisión es importante, no venimos a arriesgar, solo queremos pasarlo bien y dar cuenta de ello…





No hace falta decir que se baja mejor que se sube…












El cielo se cubrió, mala noticia para mis fotos, un gris predominará sobre ellas…





Llegamos a la laguna y seguimos bordeándola…
















¡Te pillé!…escondido, pero ¡Te pillé…!




Más Narcisos de Roca…


 Y más Narcisos de las Nieves…



Estrellitas Amarillas.

(Gagea soleirolii)












Esta hiervas, son narcisos Trombones que están a punto de florecer, este año está la cosa un poco tardía…






Los segundos ejemplares de Trombones que vemos, mientras que de los otros no paramos de encontrarnos con ellos…




Narciso Pálido
(Narcissus triandrus subsp. Pallidulus)

Con sus flores colgantes de color amariilo pálido y con las piezas periánticas vueltas hacia atrás.








En esta foto se puede apreciar viéndola más de cerca, el rastro que dejamos subiendo, se notan perfectamente las pisadas…






Ahora nos dimos cuenta de que estaba seco el rebosadero, cuando entramos al circo de la laguna, se podía apreciar perfectamente como rebosaba al agua por aquí. Lo que significa que por la baja natural no iba demasiada y por las cascadas tampoco…











Por dentro estaba decorado por los excursionistas que por aquí vienen, unos tienen mejor gusto al dejar su recuerdo que otros.










La bruma o neblina que existía, nos dejó un halo alrededor del sol en el cielo, con unos contornos de como los de un arcoíris...
¡Esto es mágico...!



Se puede ver como a un muro de contención, se le añadió un tramo más alto, para poder albergar más volumen hidráulico…






Después de un almuerzo merecido, iniciamos el descenso por el tubo. Estábamos un poco desorientados a la hora de decidir por donde lo hacíamos. Un matrimonio que paseaba por allí y que habían subido por el tubo nos dieron las indicaciones pertinentes y nos acompañaron un rato…



Marchamos por este lado del tubo, andando por los “lanchares”








Gracias a que corría poca agua, esta no nos estorbó al cruzar las piedras.


Pero tampoco no dejó hacer esas fotos de cascada, con la que pensé usar el filtro de densidad neutra que llevaba. Y esto es lo que podemos enseñar…




Ahora comprenderéis lo que puede significar andar por aquí con nieve o hielo…un peligro total…


Existen unos cables y unos hierros fijados a las rocas par que nos podamos agarrar, pero, aun así, esto es un peligro con el hielo…




























Una vez en la central, quiero mostrar algunas imágenes que me gustaron…




Unas setas de mierda…


La garganta que baja a la central…


Jacinto de los Bosques.

(Hyacinthoides hipanica)










Os dejo los mapas y la estadística de la ruta, por si pudiera interesar...





Llegamos al final de un día que dio muchas satisfacciones y si nos hubiéramos llevado las raquetas, apuesto que alguna más. Pero el peligro de este clima es grande y lo mejor pienso que fue, el no llevarlas.

También me decepcionó los Narcisos Trombones, otros años ya habían salido, pero esta primavera es tardía y ante eso no se puede hacer nada.


Es mejor que cada uno haga su propia valoración en consecuencia de lo que podemos mostraros.

Fin.
Jamm.





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3 comentarios:

  1. Muy bonito el reportaje.
    Fuisteis muy osados, pero con la cabeza bien puesta!!!!

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  2. Es mas facil leer el blog que hacer la ruta, jeje

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    1. No es osadía, es curiosidad en verlo todo y en saber hasta dónde puede uno llegar. Pudiera parecer que se arriesga por nada, la verdad es que este paraje se daba para ello, pero nunca podíamos imaginar la cantidad de nieve que había realmente. Cuando nos dimos cuenta de que era demasiado riesgo para nuestras intenciones no dudamos en darnos la vuelta. Afortunadamente nada salió mal, nuestro ego no salió dañado, nuestra única intención es poder contarlo y eso hicimos…

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