domingo, 9 de septiembre de 2018



Montes de Valdueza
Tebaida Berciana (León).
04/08/2018



                        

                         La amabilidad que tanto nos sorprendía de los pobladores de Villafranca del Bierzo, en boca del empleado del hotel donde nos alojamos, nos desaconsejó la visita a Ponferrada, y a sabiendas de nuestros gustos, nos habló de Peñalba de Santiago y de una Iglesia que había allí. La idea nos agradó tanto que no pensamos en ir a otra parte.






Camino de Peñalba de Santiago, nuestros ojos se clavaban en el relieve, una carretera que, como hacia curvas con unos desniveles impresionantes, ya merecía la pena solo por ello de haber venido por estos parajes.




Un riachuelo, que discurría por el entorno y que desemboca en el arroyo de Peñalba, que a su vez acaba en el Río Oza, me llamó la atención; quería hacer unas fotos que llevaba mucho tiempo queriéndolas hacer…y estas son…


















No sé a vosotros, pero a mí, me salió rentable esa parada, me llevaba un gran trofeo, todavía estoy alucinando…


Para nuestra frustración, nos llevamos la sorpresa de que la carretera estaba cortada, llevaba varias semanas cortada por desprendimientos. Cuando la moral estaba a punto de irse al carajo, un cartelito que ponía que el monasterio estaba abierto, nos animó a ver qué había allí y no dar por perdido el día…





¡Qué montes! ¡Esto es precioso! ¡Es para perderse y no decir a nadie donde estas…, aunque tu sepas que estas en la Tabaiba leonesa…!


El bierzo en los primeros tiempos cristianos fue conocida como la Tabaiba leonesa, fue tierra de anacoretas y santos: Genadio, Fructuoso, Valerio, Froilán, Dulcido… El Bierzo recibe su nombre de la antigua denominación romana “Bergidum Flavium”


Por fin llegamos a un pueblecito que se llama…


Montes de Valdueza

 (también conocido como San Pedro de Montes o San Pedro de Montes de Valdueza) es una localidad del municipio de Ponferrada, en la provincia de León.

El nombre tradicional es San Pedro de Montes, que es con el que se le suele conocer al pueblo por los lugareños. Es uno de los pueblos de la comarca natural y tradicional de Valdueza, situado en el Valle del Oza. Es una pedanía del municipio de Ponferrada, comarca del Bierzo, provincia de León. Se encuentra situado a más de 1.000 metros de altitud.

Nació en torno a la creación del Monasterio de San Pedro de Montes. Forma parte de la Quintería de Montes, en el Valle del nacimiento de río Oza.






Nos enteramos que allí sí, había un antiguo monasterio que se podía visitar…


¿A qué esperamos...? 


¡Vamos…!


























Parece enorme, y todo hecho de pizarra, promete…










Una vez en el interior y tras pagar 2.50€ por persona, la responsable y guía, cerró la puerta y comenzó a explicarnos lo que estábamos viendo…




Monasterio de San Pedro de Montes

Fueron los más poderosos de los monasterios bercianos en cuanto a dominios, no correspondiéndose éstos en lo económico, sufriendo sus rentas usurpaciones, tanto por parte de la realeza como de distintos señores, que en distintos momentos de la historia se temió por su supervivencia.

Añadiéndose, a mayor desgracia, la desatención por parte de las superiores instancias eclesiásticas, que aún hoy en día parece no extenderse, al no hacerse cargo el Obispado de Astorga ni en todo, ni en parte, de los gastos para su recuperación.


Lo que a mí me llamó la atención, fue su fecha de inicio; del S. IX, o sea, visigodo…, interesante…

Origen. Monacato visigótico

Fue fundado hacia el año 635 por San Fructuoso con la ayuda de su joven discípulo y albañil Baldario. San Fructuoso buscaba de nuevo la soledad tras la fundación del Monasterio de Compludo, y se internó en los valles situados entre los montes Aquilanos, edificando un pequeño oratorio dedicado a Sn Pedro Apóstol frente al antiguo Castro de Rupianensi o (Castro Rupianense), es por esto que al monasterio de San Pedro de Montes se le llama también Monasterio Rupiano o Rupianensi, en las estibaciones del pico de la Alquiana (o Guiana), en el lugar que actualmente ocupa la iglesia de San Pedro de Montes. Junto a este primer oratorio fundó el primigenio cenobio.


Pero no voy a poner toda su historia, no procede, sería hacer un corta y pega; se encuentra de manera fácil información sobre él, tan solo haré referencia, a cosas puntuales, que lo crea conveniente…




Primero y por curiosidad, vimos lo que fue una bodega…




 …que quise bajar a ver lo poco que se puede ver...


     …nada, algún contraluz y aclarando sombras ver el fondo…





        Un tronco de roble, que había en medio de un pasillo, estuvo plantado, hasta que hicieron la reforma y como a modo de memoria por su asesinato, dejaron un trozo, para decir que así ocurrió…, ¡Estovaba, vamos…!




                       Empezamos por la parte que está restaurada y preparada para albergar cosas, o bien un museo o salas para exposición…



Pasamos ya, a lo que sería el monasterio en lo que son las dependencias. Está habilitado con maderas para facilitar el paso…¡Aquello es grande y sugerente…!








¡Otro árbol condenado, en cuanto reciban dinero para reconstruir…!













Esta estancia o dependencia, correspondía a la del Abad, según nos desvelaba la guía que, aunque sabía bastante sobre el tema, no tenía interés en explicar lo que nos mostraba la muchacha…






La explicación es sencilla; es la única dependencia que tenía letrina, es decir, retrete…, que es ese cuadrado en la pared que tiene una especie de tubería que baja a la parte inferior; y de ahí no sabemos más….

¡Por lo menos una ventana oreaba los resultados de aquellas gestas…!









¡Daba mucho juego los muros para hacer fotos…!






Esto que vemos es una piscifactoría, donde los monjes criaban peces y anguilas…; tenía poca profundidad para poder cogerlos mejor…; el agua se desviaba de algún arroyo de la zona, ¡Eran expertos en eso…!










Detrás de este arco, divisábamos el claustro…











Mientras la chica nos hablaba, bueno, masticaba palabras…; ¡Que alguna cogíamos!, estábamos perplejos por la majestuosidad, de lo que allí, estábamos viendo…






Un grupo de arqueólogos estaban haciendo catas en el interior del claustro…




“…Saturnino, edificó sobre la roca donde solía orar San Fructuoso, marcada con una cruz, una pequeña ermita en honor de la Santa Cruz y de San Pantaleón. Probablemente de esta primitiva ermita procedan los restos visigodos que se encontraron hasta hace poco en el frontal de la ermita de Santa Cruz, en San Pedro de Montes con otros restos prerrománicos, entre ellos la lápida fundacional de la ermita que corresponde al año 905…”





             Continuamos por los laberintos aquellos, que formaban para nosotros los muros del monasterio. ¡Aquí si dábamos las gracias a la guía! Es cuando dimos por bien empleado el dinero de la entrada…









            Volvimos al interior de lo reconstruido, para enseñarnos que, en la actualidad, usaban los desagües que los monjes construyeron antaño…






¡Otro árbol condenado…!












En este lugar, nos muestra unas piedras que según nos contaba, eran una especie de morteros para machacar hierbas y otras plantas para dar a los lugareños, y eran tan grandes, para hacerlo en grandes cantidades…, una especia de molino...












Estas son las dependencias, que corresponden a la cocina, tenían agua canalizada hasta este lugar…














Un detalle desde más cerca, nos muestra el arco con las piedras sin soporte, como sería el cemento u otro elemento que lo pudiera pegar…








Pasamos por delante de lo que fue la cocina, por la ventana, y podemos ver un canal por donde iba el agua, que comentaba ¡Agua corriente en la cocina en el siglo…IX, o XVII, no sé…!





Recorremos por extramuros un camino que nos llevará a la iglesia del convento…
















Este arco, es de época prerrománica...





La fachada de la Iglesia, es de mármol y estuvo cubierta, con un tejadillo de pizarra, no hace mucho,…






Este es el Altar a San Genadio, del primer tercio del S. XVII.










Me sabe mal, no dar más información del interior de la Iglesia, pero no la en cuento, y creedme, y de lo que nos masticaba la chica, que hacía de guía, no me acuerdo ¡Pero de haberla iodo…!



Dentro de esa tapa, a modo de arcón, había un osario, que nos dejaron destapar y esto vimos…










           
                  La chica nos apagó la luz y se fue, por si hubieran llegado más despistados a ver el monasterio… ¡Y se acabó…!


Por si a alguien no le ha parecido suficiente estas imágenes del monasterio, encontré un video hecho con un dron, que nos da unas vistas aéreas…







Pizarra y madera, son los dos elementos fundamentales es esta construcción, y dan un ambiente realmente nostálgico y rural…, pero callemos y veamos…































Este es el bar, muy sencillo y sobretodo rústico, empapelado una parte con billetes antiguos y de otros países, pero si entráis no saquéis fotos, a Sara no le gusta…




























































































Nos vamos ya, pero esta ruta de este cartel, ¡tengo que venir hacerla! ¡tiene que ser extraordinaria, por los montes que acabamos de ver y con la visita al otro pueblo que no hemos podido pasar!

¡Cómo me llama la atención…¡















Las circunstancias hicieron que viéramos algo que no estaba previsto, seguro que, de no ser así, no hubiéramos disfrutado de este magnífico lugar, y de sus buenas vibraciones. Se queda pendiente Peñalba de Santiago, que tarde o temprano con una muesca en nuestras vidas, quedará como visitada, sin embargo, de no haber sido por las fatalidades del destino Montes de Valdueza, no lo hubiéramos conocido.


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Fin.
Jamm.



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